Entre los papeles que Valeria dejó en su habitación, está este, con dos frases, una de Juan Pablo I y otra de Juan Pablo II. Tal vez las encontró en su libro de lectura espiritual, o se las dictó una hermana. Debieron impresionarla y por eso las conserva.
“Señor, tómame como soy, con mis defectos, con mis debilidades. Pero hazme llegar a ser como Tú deseas” (Juan Pablo I Audiencia general, 13 de septiembre de 1978).
“¡No tengáis miedo! Cristo conoce «lo que hay dentro del hombre»” (Juan Pablo II. Homilía en el inicio de su Pontificado. 22 de octubre de 1978).