Al estar con Ella y estar acompañado por el deseo de verla feliz, el frío como que lo sientes y no lo sientes.
Publicamos hoy un párrafo de un e-mail de la Hna. Clare al P. Rafael y a la Madre Ana. Lo escribió el 26 de mayo de 2015, de regreso de una peregrinación al Santuario de El Cajas, rezumante de amor a Nuestra Madre.
El día domingo por la tarde regresamos de estar con la Virgen en El Cajas. Pasamos la noche con Ella y con Jesús para la vigilia de Pentecostés. Hacía mucho frío, pero no importaba. Al estar con Ella y estar acompañado por el deseo de verla feliz, el frío como que lo sientes y no lo sientes. ¿Me entienden, verdad? Antes de regresar a Portoviejo, varias de las que estuvimos allí, experimentamos que Nuestra Madre nos dio las gracias por nuestro esfuerzo.